Mientras Milei mete el pie en el acelerador para abrir locales en el conurbano, las bases libertarias denuncian piedrazos, pintadas y sabotajes. La política se pone sucia en el territorio.
Mientras Milei mete el pie en el acelerador para abrir locales en el conurbano, las bases libertarias denuncian piedrazos, pintadas y sabotajes. La política se pone sucia en el territorio.