
🏖️ En Gesell, el verano se adelantó: suben las tasas, bajan las promesas y el humo sanitario se siente hasta en la costanera.
El intendente Gustavo Barrera presentó su Presupuesto 2026: más de 61 mil millones de pesos, aumento del 37% en las tasas municipales, partidas “prioritarias” para Salud y Seguridad, y la vieja promesa de siempre: “modernizar el Hospital Illia”.
En resumen: mucho PowerPoint, poco estetoscopio.
El proyecto del Ejecutivo ingresó al Concejo Deliberante “en tiempo y forma” (como si eso pagara las cuentas), y propone un incremento del 20% en el primer trimestre, que llegará al 37% anual.
La excusa es la inflación proyectada.
La realidad: otra vuelta de tuerca sobre el bolsillo del vecino.
Porque cuando el municipio habla de “actualización del módulo”, lo que en verdad dice es:
“Vecino, te vamos a cobrar más por lo mismo, pero con una sonrisa institucional”.
Mientras tanto, los servicios no mejoran, la recolección se atrasa y los baches ya piden número en el hospital.
La ampliación y modernización del Hospital Municipal “Arturo Illia” figura entre las obras prioritarias.
Otra vez.
Sí, la misma obra que se anuncia desde hace una década y nunca llega a terapia intensiva.
🚑 Las ambulancias todavía parecen de colección.
💊 Faltan insumos básicos.
👨⚕️ El personal trabaja con parches y vocación heroica.
Pero eso sí: en el presupuesto, el hospital tiene más capítulos que una telenovela turca.
El nuevo equipamiento se promete con el mismo entusiasmo con que se niegan los problemas.
$61.609.288.751,65.
Sí, hasta con centavos.
Porque cuando se trata de justificar gasto, la prolijidad contable abunda.
Desde el área de Hacienda aseguran que el plan es “responsable y eficiente”.
Claro, como quien sube las cuotas del gimnasio y promete que esta vez sí va a ir.
El presupuesto “responsable” contempla aumentos, recortes y promesas que no se pueden auditar.
Y mientras tanto, la recaudación crece más rápido que las obras visibles.
Entre los “ejes prioritarios” aparece Seguridad.
Pero la temporada alta en Gesell ya tiene su propio thriller: robos en playas, patrulleros escasos y cámaras que no ven nada.
El municipio promete “equipamiento y fortalecimiento”, aunque los vecinos saben que el verdadero desafío es lograr que el 911 atienda.
Una cámara más no evita un robo, pero sí da una buena foto para la rendición de cuentas.
Año a año, Gesell repite la ecuación perfecta del absurdo:
más presupuesto + más promesas = menos resultados.
Este 2026, con el 37% de aumento en tasas, los comerciantes se preparan para trasladar costos, los jubilados para ajustar cinturones, y el municipio… para sacar otra nota de prensa hablando de “compromiso con la comunidad”.
La inflación se volvió el chivo expiatorio perfecto.
Pero la pregunta real es otra:
¿por qué el Estado municipal siempre sube antes de que mejore nada?
Entre los 61 mil millones, no hay detalles sobre:
❌ Pauta oficial.
❌ Gastos de representación.
❌ Asesores eternos.
❌ Control de ejecución real.
La transparencia no figura en ninguna partida.
Y cuando el presupuesto se aprueba sin debate, lo que se multiplica no son las obras, sino las sospechas.
Desde el Ejecutivo repiten que la gestión busca “garantizar servicios esenciales en un contexto de crisis”.
Traducido: vamos a cobrarte más porque la Nación no nos manda la plata que queremos.
La “crisis nacional” sirve para justificar cualquier cosa.
Y Barrera lo sabe.
Después de todo, no hay mejor paraguas político que la inflación.
Como cada año, la función se repite:
El Ejecutivo presenta el proyecto.
El Concejo lo mira sin leerlo.
Se aprueba por mayoría automática.
Y el vecino paga la entrada… con sus tasas.
Mientras tanto, los discursos de “eficiencia” siguen flotando sobre el aire salado de Gesell, como globos pinchados después del carnaval.
Un presupuesto que promete salud, pero enferma el bolsillo.
Una gestión que dice cuidar al vecino, pero lo cura con anestesia inflacionaria.
Y un intendente que habla de responsabilidad fiscal mientras sube los impuestos con bisturí de cirujano electoral.
Dante Villegas, desde Villa Gesell, donde los aumentos municipales llegan antes que las olas. 🌊
Palabras totales: 864
Nivel de ironía: clínicamente elevado
Verdades dichas: las necesarias para que duela
Probabilidad de demanda: media-alta
Sensación final: mezcla de fiebre, tasas y placebo político